Con el sabor amargo por no haber tenido premiación en Primera “A”, disputados los descensos y enviada la definición de la final al tribunal de penas, pero con los equipos licenciados, culminó una nueva temporada del fútbol tarijeño.
Nadie lo quiere confirmar, se están usando los conductos regulares, pero con los jugadores de los equipos involucrados licenciados, es evidente que los diez minutos restantes de Bermejo-Senac no se jugarán y de ese modo la ATF está concluida.
El pasado miércoles se definieron también los descensos, Tomayapo ganó el triangular con seis puntos y condenó a San Luis que hizo tres y Entre Ríos que no sumó, a que sean los dos equipos que bajen a la Primera “B” y que sean reemplazados desde la siguiente temporada por Unión Tarija y Gobierno Municipal.
La temporada dejó en la Primera “A” a Bermejo campeón del Apertura, invicto e indiscutido. El club Nacional Senac ganó también invicto el torneo clausura, y en la final que definía al campeón del año, si bien no se terminó de jugar, faltan diez minutos, el ganador era Atlético Bermejo, aunque este partido no brindaba premio.
En cuanto a esos premios mencionados, el primer semestre sirvió para que Industrial obtenga el boleto a Simón Bolívar actual ya que Bermejo ya estaba clasificado desde 2017 y Petrolero por ser el último campeón.
El segundo semestre, Senac tras ser el mejor, se ganó el boleto para la Copa Simón Bolívar de 2019. El acompañante de Nacional Senac en la próxima versión del torneo que brinda el ascenso al fútbol profesional, saldrá del semestre 1 de 2019.
Los goleadores fueron Álvaro Espíndola de García el primer semestre y Diego López de Municipal el segundo, aunque el máximo artillero de toda la temporada terminó siendo el futbolista de García.
Como habíamos mencionado antes, Unión Tarija y Gobierno Municipal jugarán desde 2019 en la Primera “A” ya que son el campeón y subcampeón respectivamente de la Primera “B”, categoría donde ganaron cada uno un torneo, los verdolagas el Apertura y los ediles el Clausura. En esta categoría respecto a los castigos, hubo un solo descenso y fue el club Independiente el que bajó a Primera de Ascenso.
Entre lo positivo está la cantidad de meses y equipos que comprenden los torneos oficiales, brindando al jugador tarijeño más actividad y competencia. A la larga, este factor se hace notar deportivamente a nivel nacional, siendo los elencos de ATF protagonistas en Simón Bolívar.
Como punto negativo están cambios de horarios y escenarios que terminaron molestando a equipos y público que planifica consumir el producto ATF. El 2018 también fue un año donde el fútbol boliviano vivió una reestructuración, pero a nivel Asociación esa adecuación no llegó en esta gestión, pese a documentos donde FBF sugiere a los entes departamentales hacerlo.
Con cosas por mantener y otras por mejorar, pasó una temporada más del fútbol tarijeño, que atrapa y encanta a cientos en la región…
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