La Asociación Cruceña de Fúbol (ACF) a través de una carta firmada por el primer vicepresidente, Ronny Ardaya, y el secretario general, Noel Montaño, le solicita -al que aún consideran presidente de la FBF, Carlos Chávez Landívar-, que remita a la Conmebol y por ende a la FIFA, las observaciones que hizo para no asistir al congreso del 25 de agosto en Cochabamba.
En ese congreso extraordinario se revocó el mando de Chávez y se nombró al potosino Marco Ortega como presidente interino de la entidad para que convoque a elecciones en un plazo no mayor a 40 días. Pero la ACF considera ese congreso ilegal observando desde la misma convocatoria, ignorando el congreso que había sido convocado para el 9/10. Además se observa que en el segundo llamado, no estaba la firma de Wálter Torrico, el nuevo secretario general.
La carta detalla en sus siete puntos, cada una de las observaciones entre las que destaca la falta de sustentación legal para tratar como único tema la revocatoria a Chávez, el hecho de que no esté Cochabamba pese a estar acreditada y siendo reconocida, el que se hubiera aplicado el artículo 81 pese a que el estatuto sí contempla la elección, continuidad y cesación del presidente de la FBF e incluso designando un técnico sin haber concluido el contrato anterior.
La postura de la ACF sigue firme y esta noche en reunión de consejo central extraordinario, se iba a volver a tratar el tema para asumir una postura de aquí en adelante. Ronny Ardaya, en su condición de primer vicepresidente, dirige las reuniones de la ACF ya que Pablo Salomón, el actual titular, se encuentra con arresto domiciliario desde el 1 de agosto. La carta enviada ratificó la posición de la única asociación que decidió no asistir al congreso extraordinario.
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