Hasta el próximo 15 de junio el fútbol orureño está paralizado luego de haberse disputado dos jornadas, esta fecha es tentativa ya que, en función a la evolución de la pandemia, esto podría prolongarse por algunos días más, algo que pondría en “jaque” a algunos clubes orureños que se verían desmantelados, pues algunos de sus refuerzos buscarían volver a la División Profesional con la apertura del libro de pases.
El torneo de la Primera “A” organizado por la Asociación de Fútbol Oruro (AFO), comenzó con una buena expectativa de parte del aficionado al ver que las dirigencias de los clubes tomaban con seriedad este certamen y en el afán de clasificar a Copa “Simón Bolívar”, reforzaron sus planteles de forma apropiada con jugadores que militaron en el ámbito profesional, algo que ahora podría ser contraproducente.
Y es que el parate obligado que se tuvo en el torneo, primero por los problemas internos de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) y ahora por el incremento de casos positivos de Covid-19, hicieron variar la planificación de algunos elencos que esperaban que para finales de junio se concluya con el campeonato corto que solo cuenta con nueve fechas.
Hasta la fecha solo se jugaron dos jornadas del campeonato que está paralizado hasta el 15 de junio por determinación de los delegados, algo atinado ante la ola de casos que va azotando a la región, pero esta espera de la reanudación del torneo, en caso de incrementarse el parate, podría traer consecuencias nefastas a los clubes que al final del campeonato se verían desmantelados.
Esto se debe a que, en algunos casos se firmaron contratos por tiempo, es decir que se planificó la vigencia de algunos jugadores por el tiempo previsto de la conclusión del torneo y firmar un nuevo contrato implicará un mayor gasto.
A esto se suma que en julio se abrirá el libro de pases y algunos clubes ya solicitaron que tenga la salvedad que sea de forma abierta, ese tema será tratado en reunión de la División Profesional, algunos jugadores que llegaron a reforzar a los clubes orureños están a la espera de julio para buscar su vinculación a otros clubes profesionales, algo que dejaría a los elencos sin sus principales figuras y el torneo se vería deslucido.
Otro de los problemas es que hasta ahora la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) no señaló si se cambiará la fecha de inicio de la Copa “Simón Bolívar” prevista para mediados de agosto, sin embargo es algo que se dará de todas formas ya que en otros departamentos los torneos locales recién comenzaron el pasado fin de semana, de todas formas, si no se da un retraso del torneo nacional, los clubes orureños estarán con poco tiempo para prepararse para este certamen nacional.
La medida de aplazar las fechas del campeonato fue atinada por parte de los delegados, preservando la salud de sus jugadores, cuerpo técnico y dirigentes, pero si el panorama no cambia se tendrá que analizar otras alternativas para concluir el torneo o buscar otra salida “salomónica” para que los elencos no se vean perjudicados.
Esta es una de las razones para que los delegados pidan una compensación económica de parte de los dirigentes de la AFO para subsanar los problemas que causó el parate en el torneo local.
