Basta con darse un paseo por sus alrededores para observar el deterioro de la infraestructura del estadio Juan Carlos Durán. Entre lo que más resalta está la malla caída del perímetro de la curva, que está junto a la avenida San Aurelio. Una vez dentro, llama la atención el techo de la casamata de los suplentes, el cual está quemado, y las butacas inservibles. Las luminarias funcionan a un 60 por ciento de su capacidad, pues tienen varias pantallas quemadas. Éstos son algunos de los desperfectos que hacen parecer que el escenario de Real Santa Cruz está abandonado. No hay sereno en el lugar y los malvivientes hacen de las suyas por las noches.
La dirigencia fue consultada sobre lo deteriorado que está el estadio y aseguraron que asumieron el mando del club el 8 de abril por estos y otros motivos, como la plantilla de jugadores impaga y deudas por agua y luz. “Se están pagando cuentas por alrededor de 40.000 dólares. En este monto figura la cancelación de los sueldos, pues ahora sólo se le debe un mes al plantel y no tres, como llegó a ocurrir”, sostuvo Carlos Sánchez, que está a cargo de la comisión del plantel de fútbol. Las otras comisiones que reemplazaron en el mando a Ronald Vaca la integran Juan Carlos Durán (comisión de infraestructura), Ignacio Talavera (administrativa) y Osvaldo Gutiérrez (división menores).
Para realizar mejoras al estadio, la directiva se ha trazado el objetivo de conseguir ingresos económicos permanentes firmando hace poco un convenio con un empresario que invertirá $us 200.000 en la construcción de cuatro canchas de tenis y dos de fútbol siete con pasto sintético, en la sede alba. “Estarán listas a fin de año y nos pagarán por mes 3.500 dólares”, explicó Sánchez. También se ha alquilado el coliseo durante los próximos dos años y medio, a un pago mensual de $us 1.500.
Tampoco es de las mejores la situación que atravesó el plantel, que en la segunda rueda del torneo de la Primera A estuvo dirigido por el jugador brasileño Marcelo Dias de Oliveira; sin embargo, Iver Valladares reasumió hace diez días el mando técnico del equipo albo, que se ubica quinto en la liguilla por el título de la temporada 2009.
La dirigencia fue consultada sobre lo deteriorado que está el estadio y aseguraron que asumieron el mando del club el 8 de abril por estos y otros motivos, como la plantilla de jugadores impaga y deudas por agua y luz. “Se están pagando cuentas por alrededor de 40.000 dólares. En este monto figura la cancelación de los sueldos, pues ahora sólo se le debe un mes al plantel y no tres, como llegó a ocurrir”, sostuvo Carlos Sánchez, que está a cargo de la comisión del plantel de fútbol. Las otras comisiones que reemplazaron en el mando a Ronald Vaca la integran Juan Carlos Durán (comisión de infraestructura), Ignacio Talavera (administrativa) y Osvaldo Gutiérrez (división menores).
Para realizar mejoras al estadio, la directiva se ha trazado el objetivo de conseguir ingresos económicos permanentes firmando hace poco un convenio con un empresario que invertirá $us 200.000 en la construcción de cuatro canchas de tenis y dos de fútbol siete con pasto sintético, en la sede alba. “Estarán listas a fin de año y nos pagarán por mes 3.500 dólares”, explicó Sánchez. También se ha alquilado el coliseo durante los próximos dos años y medio, a un pago mensual de $us 1.500.
Tampoco es de las mejores la situación que atravesó el plantel, que en la segunda rueda del torneo de la Primera A estuvo dirigido por el jugador brasileño Marcelo Dias de Oliveira; sin embargo, Iver Valladares reasumió hace diez días el mando técnico del equipo albo, que se ubica quinto en la liguilla por el título de la temporada 2009.
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