La Villa Montes Cup 2017 albergó a gran cantidad de equipos del municipio tarijeño, en un torneo dedicado a la niñez de esta región y que reunió a varias categorías, entre ellas Sub -7, 8, 9, 11, 13. “Es muy grato organizar este torneo, ver a tantos niños nos enorgullece, porque ellos son el futuro de nuestro país”, mencionó el secretario General del Gobierno Autónomo de Villa Montes, Marcelo Gonzales. El equipo Sub-11 de la Academia Tahuichi, dirigido por Hugo Romero, debutó contra Bilbao Rioja. Los chicos con amplia superioridad futbolística salieron victoriosos con un marcador abultado de ocho tantos contra cero. Ya en la segunda fecha del grupo E rivalizó con Bermejo, con un indiscutible triunfo de diez goles a cero. Con dos victorias al hilo Tahuichi se perfilaba como favorito. Ya en el último partido de la serie enfrentó a Caraparí, otra vez los muchachos sacaron la garra y se llevaron la victoria para avanzar a la liguilla final. Los tahuichis eran favoritos pero los jugadores no se confiaban, bien temprano le tocaría jugar con un rival de siempre, Maquina Vieja, un partido bien jugado en ambos lados, pero los pupilos del profesor Hugo Romero sentaron presencia en la cancha y ganaron por cuatro goles a cero, sellando la clasificación a la semifinal. Aquella instancia sería aún más difícil porque del otro lado estaba Pilcomayo, el equipo de Villa Montes. El marcador terminó cero a cero en tiempo reglamentario, de modo que los penales definirían el pase a la final. Tras una serie de tiros Tahuichi logró superar el último escalón. DEFINIÓN DEL TÍTULO Llegó la definición del título, en una tarde con llovizna. Tahuichi rivalizaba contra Planeta Gol en un duelo cruceño, como toda final con idas y venidas, roces, pero el marcador no se movió (0-0). Tahuichi afrontaba otra serie de penales, aunque esta vez por la corona. Los chicos se mostraban seguros y así fue como uno a uno fueron pateando; ya en el último penal, se definió la suerte a favor de Tahuichi: gol y festejo tan ansiados por los padres y profesores. Al final, los jugadores de Tahuichi estrecharon la mano a sus adversarios en muestra de respeto y admiración. Así culminó el torneo que incentivó a trabajar por la niñez.
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