Oruro Royal puso a fin a su tránsito en la Copa “Simón Bolívar”, al ser superado en la segunda fase del torneo ante Guabirá, costándole la eliminación, en una actuación conmovedora del equipo que decepcionó en este encuentro a su hinchada que había rescatado con actuaciones interesantes en la primera parte del torneo, ante equipos de Fraternidad Tigres, 31 de Octubre de La Paz; Enrique Happ, Universitario de Cochabamba y el otro orureño Deportivo Cristal.
La actuación de los decanos si bien no era de las mejores, mostrando algunos altibajos en especial cuando estaba de visita, pero que la recompensa estuvo en el “Bermúdez” y muchos de ellos parece que no advirtieron esta falencia para corregirla a tiempo cuando el elenco jugaba fuera de casa.
En el último partido jugado como local, que se realizó ante uno de los equipos candidatos al título de este torneo como Guabirá, logró una notable victoria, en el mejor partido de los “albinegros” dirigidos por Juan Patricio Navía, el 4-1 en su favor esta para despertar una expectativa poco usual, daban muchos simpatizantes del equipo que en Montero, estaban cerca de registrar un empate, para evitar la lotería de los penales que siempre es riesgoso, pero se tenía presente que el plantel de jugadores estaban preparados para cualquier emergencia y seguir adelante en este evento cuyo campeón ingresará en forma directa al círculo de la Liga del Fútbol Profesional y el segundo tendrá el derecho de jugar el indirecto ante el penúltimo liguero de Wilstermann de Cochabamba.
AJETREO
El ajetreo en la institución “decana” como nunca tuvo un optimismo en los dirigentes que estuvieron trabajando sin pausas para poder conformar un equipo respetable en el torneo, con grandes ambiciones de llegar a la Liga.
El primer equipo de fútbol en Bolivia, no debería estar al margen del máximo torneo del fútbol que constituye el fútbol profesional, haciendo casi lo imposible por conformar un equipo competitivo, logrando casi cambiar el 80% de los jugadores.
Una de sus máximas estrellas y sobre el cual se esperaba mucho más de lo exhibido fue el colombiano Dayzon de Jesús Gualé, pero su actuación no fue como la esperada y otros extranjeros que no estuvieron a la altura y exigencias del mismo.
Los otros jugadores que estuvieron en diferentes equipos, entendemos que la falta de experiencia o el mismo tránsito de pasar del fútbol “amateur” al semiprofesional, mostró la diferencia enorme en ambos casos.
Otros factores fue también sobre la dirección técnica, que en los albores del torneo sufrió el cambio, cuando el anterior estuvo ya trabajando con el equipo, ahora muy posible que con ese mismo cuerpo técnico podía también recoger los mismos resultados, pero de todas maneras es un factor que se debe tomar muy en cuenta, para lo posterior.
INEXPLICABLE
Empero muchos hinchas del equipo, no se pueden explicar su comportamiento en el transcurso del partido, donde entendemos el descuido en demasía en su defensa y en sus tres líneas que dieron un cúmulo de ventajas para la goleada del 1-5.
Pero lo más curioso es que en la tanda de los penales, mostraron su falta de capacidad tanto en lo anímico como en lo técnico, para salir con una desventaja de 1-4 y terminar con las esperanzas de seguir en circulación en el torneo.
Lo ocurrido con el cuadro más añejo de Bolivia, que sirva como experiencia y que no se apague en los dirigentes el objetivo de conseguir ser parte de la Liga del Fútbol Profesional Boliviano o simplemente del Círculo Privilegiado.
La actuación de los decanos si bien no era de las mejores, mostrando algunos altibajos en especial cuando estaba de visita, pero que la recompensa estuvo en el “Bermúdez” y muchos de ellos parece que no advirtieron esta falencia para corregirla a tiempo cuando el elenco jugaba fuera de casa.
En el último partido jugado como local, que se realizó ante uno de los equipos candidatos al título de este torneo como Guabirá, logró una notable victoria, en el mejor partido de los “albinegros” dirigidos por Juan Patricio Navía, el 4-1 en su favor esta para despertar una expectativa poco usual, daban muchos simpatizantes del equipo que en Montero, estaban cerca de registrar un empate, para evitar la lotería de los penales que siempre es riesgoso, pero se tenía presente que el plantel de jugadores estaban preparados para cualquier emergencia y seguir adelante en este evento cuyo campeón ingresará en forma directa al círculo de la Liga del Fútbol Profesional y el segundo tendrá el derecho de jugar el indirecto ante el penúltimo liguero de Wilstermann de Cochabamba.
AJETREO
El ajetreo en la institución “decana” como nunca tuvo un optimismo en los dirigentes que estuvieron trabajando sin pausas para poder conformar un equipo respetable en el torneo, con grandes ambiciones de llegar a la Liga.
El primer equipo de fútbol en Bolivia, no debería estar al margen del máximo torneo del fútbol que constituye el fútbol profesional, haciendo casi lo imposible por conformar un equipo competitivo, logrando casi cambiar el 80% de los jugadores.
Una de sus máximas estrellas y sobre el cual se esperaba mucho más de lo exhibido fue el colombiano Dayzon de Jesús Gualé, pero su actuación no fue como la esperada y otros extranjeros que no estuvieron a la altura y exigencias del mismo.
Los otros jugadores que estuvieron en diferentes equipos, entendemos que la falta de experiencia o el mismo tránsito de pasar del fútbol “amateur” al semiprofesional, mostró la diferencia enorme en ambos casos.
Otros factores fue también sobre la dirección técnica, que en los albores del torneo sufrió el cambio, cuando el anterior estuvo ya trabajando con el equipo, ahora muy posible que con ese mismo cuerpo técnico podía también recoger los mismos resultados, pero de todas maneras es un factor que se debe tomar muy en cuenta, para lo posterior.
INEXPLICABLE
Empero muchos hinchas del equipo, no se pueden explicar su comportamiento en el transcurso del partido, donde entendemos el descuido en demasía en su defensa y en sus tres líneas que dieron un cúmulo de ventajas para la goleada del 1-5.
Pero lo más curioso es que en la tanda de los penales, mostraron su falta de capacidad tanto en lo anímico como en lo técnico, para salir con una desventaja de 1-4 y terminar con las esperanzas de seguir en circulación en el torneo.
Lo ocurrido con el cuadro más añejo de Bolivia, que sirva como experiencia y que no se apague en los dirigentes el objetivo de conseguir ser parte de la Liga del Fútbol Profesional Boliviano o simplemente del Círculo Privilegiado.
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