El 2-1 hizo que la academia de Santa Cruz retenga el título del Mundialito Paz y Unidad. La victoria era la única vía que llevaba a los bolivianos al trono, mientras que el empate le bastaba a los guaraníes para gritar campeón. Con estos antecedentes, el partido fue intenso, con pierna fuerte y pocas situaciones de gol, aunque con Tahuichi dando un mejor trato a la bola a nivel colectivo.
Guaraní comenzó en ventaja en el arranque de las acciones (6’), con un cabezazo de Ángel Alarcón tras un córner.
Tahuichi mantuvo la calma a pesar de la adversidad y niveló la cuenta de inmediato (11’). Jean Pierre El Hage apareció en forma oportuna en el área de meta para colocar la cabeza tras un centro desde la izquierda.
El resto del primer tiempo fue favorable para los tahuichis, pero les faltó lucidez y frialdad en la finalización de las jugadas de ataque.
En el complemento, Guaraní amenazó de entrada la portería de Tahuichi en un par de ocasiones, sin embargo el resto del duelo se dedicó a destruir el juego del rival.
Si bien careció del volumen de juego que exhibió en la etapa inicial, Tahuichi siempre trató de llevar la iniciativa en ofensiva pero sin crear opciones de gol.
Cuando la desesperación empezaba a cundir en el banquillo de los anfitriones, Leonardo Arana surgió libre de marca en el segundo palo para empalmar un centro de El Hage para cambiar la dirección de la pelota y decretar el 2-1 a los 68 minutos.
El resultado no se movió porque el local supo mantener el ritmo ante un adversario que equivocó los caminos para llegar a la igualdad.
Tahuichi obtuvo la corona al sumar siete puntos, uno más que Guaraní. Otro paraguayo, Santani, se llevó el tercer lugar al empatar sin goles ante Dallas FC.
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